Desde luego que usaban y fabricaban joyas. En la práctica la fabricación de joyas en China se inició hacia el 3500 a.de.C., en el Neolítico Medio (Culturas Yang-Shao y Lungshanoid). Para el diseño fueron elegidos motivos religiosos que usaban en ceremonias budistas.
La tradición china atribuye a estos personajes mitológicos la fundación de la civilización china y la invención de las instituciones sociales, culturales y económicas, como la familia, la agricultura, la escritura, etc. A pesar del carácter legendario de las historias que se cuentan sobre estos personajes, que habrían vivido cientos de años y serían responsables de hechos milagrosos, es posible que en el origen de estas leyendas se encuentren personajes reales. Estos fueron los míticos "Tres Emperadores" –Los tres Augustos-: Fu Xi el " Soberano Celestial, Nuwa " El Soberano Terrenal " y Shennong el "Soberano humano". Los Tres Emperadores eran, según la mitología, gobernantes de china y reyes-dioses.
Múltiples leyendas dieron pie a la unión de emperadores con dioses y a la vista de los mortales se aparecían en forma de dragones que premiaban o castigaban las actitudes humanas según los comportamientos.
En la artesanía y joyería china el dragón y el fénix fueron los primeros motivos populares y lo continúan siendo hoy en día.. El dragón representa las fuerzas primarias de la naturaleza y el universo. Se le asocia con la sabiduría y la longevidad. El dragón "de cinco garras" fue un símbolo de los emperadores chinos, mientras que el ave fénix o fenghuang lo fue de la emperatriz china.
La pendiente era uno de los elementos más comunes de la joyería de China y eran usados por hombres y mujeres indistintamente. Podían ser piezas muy complejas y d gran tamaño. Al igual que en otras civilizaciones, el material predominante fue la plata con ocasionales aportaciones de oro y bronce.
Uno de los materiales más destacados, usados y apreciados para su utilización en piezas de joyería fue el Jade. Se le atribuían cualidades que lo hacían semejante a los humanos tales como la belleza y la dureza. Desde un principio se le atribuyeron cualidades que simbolizaban dignidad, gracia y alta moralidad de aquellos que lo poseían. También era usado como talismán dado que reflejaba la mala suerte haciéndola alejarse.
Hasta algo más de la mitad de nuestra era, el jade utilizado en china fue la nefrita, más común y de menor valor que la jadeíta. Esta se empezaría a utilizar a partir del siglo XVII. Un antiguo proverbio chino refería: El oro es valioso, pero el jade no tiene precio.
El color azul ha sido tradicionalmente el color Imperial. Se ha utilizado siempre para mostrar realeza o alcurnia. Por esta razón los pabellones reales aparecían pintados con esmaltes azulados.
En China, como en otras culturas, las joyas eran usadas por ambos sexos para mostrar nobleza y riqueza. Joyas, amuletos religiosos y otros artículos decorativos a menudo se colocaban en las tumbas o durante el entierro. Los gobernantes y altos funcionarios eran enterrados con piezas de jade para protegerlos en el más allá y algunos, incluso, fueron enterrados en una especie de panteones hechos completamente de jadeíta. Hoy en día en China las perlas, el jade (nefrita y jadeíta) y esmalte vidriado siguen siendo los materiales “preciosos” más populares en China. Los chinos no olvidan su pasado y estas joyas son una parte integral de su cultura, genealogía y espiritualidad.
Como hemos comentado anteriormente, el Jade es valorado por los chinos más que cualquier otra piedra preciosa. El jade es el término que se aplica a las formas de jadeíta y nefrita. Aunque es similar en apariencia, la jadeíta es considerada el verdadero jade y es más valorada que la nefrita. El Jade era utilizado para piezas de joyería en el Neolítico, sin embargo no alcanzaría su máximo esplendor y apogeo hasta la dinastía Shang (1600-1050 a.de.C). El Jade simboliza la nobleza, la prosperidad, la perfección y la inmortalidad. También se cree que el Jade atrae la suerte y la fortuna. En China regalar jade es una expresión de amor.
En la joyería tradicional china se utilizan los nudos como elementos ornamentales dado que representan preceptos budistas que hacen referencia a los caminos de la vida. Estas joyas con nudos suelen una piedra central de jade, monedas, perlas o cuentas de vidrio. Los hilos con los que se forman los nudos se prolongan hasta el cuello para conformar un collar o se enrollan en la muñeca a modo de pulseras. Existe mucha bibliografía en la que se analizan las diferentes técnicas usadas.
Una variable más a la hora de explicar la amplia riqueza cultural alrededor de la joyería es la de los vínculos comerciales de los diferentes pueblos del continente asiático. Uno de estos ejes lo constituyo la existencia de la Ruta de la Seda. Realmente la constituían una amplia red interconectada de rutas comerciales. Con más de 8.000 kilómetros de largo que atravesaban el continente asiático conectando China con el valle del Indo, Persia y los pueblos mediterráneos de Canaán, Egipto, Micenas y Roma. Aunque el nombre implica que el intercambio de seda fue el origen de estas rutas no era el único producto que se comercializaba. El flujo era bidireccional, de este a oeste y viceversa. Tres mil años antes de Cristo el de gemas semipreciosas como el lapislázuli y productos como el algodón egipcio se dirigieron hacia el este por la Ruta de la Seda. El jade, marfil, cera de abejas, alcanfor, almizcle y seda de China, Borneo y la India realizaban el camino contrario.
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