En los últimos post ¿Hay leyendas urbanas en la moda? y ¿Qué mitos de la moda son falsos? hemos venido repasando algunos tics o costumbres que aplicamos a la hora de adquirir ropa o de vestirla. Muchas de vosotras habéis contado o sugerido algunos errores que se siguen cometiendo y que hemos de desterrar de nuestro imaginario colectivo.
Esta razón nos ha animado a seguir hablando de esas manías o errores que cometemos cargándonos de razones para justificarlos.
Tengo mi propio estilo, además se complementa bien con mi forma de ser, desde que tenía quince años me ha ido bien. Lo curioso es que ahora tienes cuarenta y han trascurrido veinticinco años de tendencias incorporaciones a la moda impensables entonces. Es cierto que la moda es cíclica y que prendas de los noventa están hoy de actualidad. Pero no lo es menos que hoy se complementan de diferente manera resultando el conjunto actual y novedoso. Teniendo en cuenta estos cambios no solo disfrutarás más a la hora de vestir, además te harán parecer más joven.
Ser femenina, no está reñido con lucir prendas tradicionalmente de hombre. Todo lo contrario. Cada vez más la ropa se plantea más unisex. La diseñadora Coco Chanel fue una visionaria para su época con los trajes “garçon”. Posteriormente fueron los cortes de pelo y hoy prácticamente cualquier prenda puede lucir igual de bien en hombres como en mujeres. Los grandes modistos así lo han entendido y las grandes cadenas comerciales, como Zara, ofrecen sudaderas, suéteres o chaquetas con muy ligeras diferencias en las hechuras.
En la misma línea, cada vez nos vamos alejando más del pensamiento que justificaba que las camisetas y sudaderas son de uso ocasional o de sport. Es cierto que hace algunos decenios su uso quedaba limitado a los asiduos al gimnasio. Estas prendas han crecido hasta convertirse en complementos elegantes y de tendencia. Los mejores diseñadores están exhibiendo modelos con adornos o impresos y ayudando a la calle a combinar con faldas, pantalones y otros complementos.
Mezclar estampados no resulta elegante. Aseveración falsa con un punto real. Me explico, combinar rayas y flores puede ser chic y elegante pero también, si las combinas con mal gusto, pueden convertirte en un perfecto adefesio. La mezcla de estampados equilibrada y bien hecha pueden mostrarte juvenil y fresca al tiempo que realzará tus principales virtudes.
Otra idea ridícula es que mezclar complementos de oro y plata no es elegante. Son materiales que combinan a la perfección pero como en todo es importante poner gusto y sentido común. Optar por el minimalismo y el diseño serán acicate de buen gusto. Las alharacas y estridencias en las joyas, con pedruscos y cambios de estilo y color son de mal gusto, tengan el valor que tengan.
En fin, se repiten en los argumentos las expresiones “buen gusto” y “sentido común”, pero en la moda y el vestir son tan importantes como en el resto de nuestra cotidiana vida. No es ningún pecado, cuando tenemos dudas al respecto de una determinada combinación o prenda, pedir opinión a nuestro entorno de confianza.
Comments (0)