A la hora de confeccionar una prenda, quizás, la acción más importante, además del patrón, sea la elección del tejido. Una decisión inadecuada en este sentido puede hacer fracasar el resultado final. Es verdad que no es una tarea especialmente complicada pues, por lo general, casi siempre existen un par de opciones para el emparejamiento tejido patrón.
El tejido si condicionará el producto final y sus posteriores cuidados, limpieza y planchados. También influirá en la confección pues no todos los tejidos soportan los mismos tipos de costura ni son iguales en sus uniones y apresto. En ocasiones no elegimos la tela para utilizar un patrón determinado. Puede ocurrir que nos enamoremos de un tejido determinado, por su textura, color, caída, volumen, etcétera, y necesitemos encontrar el patrón adecuado para ese material. Si repasamos genéricamente algunas de las más utilizadas observaremos de manera rápida las diferencias.
- Gasa. Básicamente podemos definir esta tela como una malla. Dependiendo del número de hilos será más o menos ligera y transparente. Dos tejidos muy utilizados de gasa son el Tafetán y la Sarga. El material más versátil en el que se suelen realizar, además del algodón, son el Nylon y el Poliéster.
- Chifón. Muy utilizado para trajes de noche por sus caídas y su vaporosidad. Se elabora utilizando hilos crepé y los materiales más usados son el algodón y la seda. También se elaboran telas con fibras sintéticas. El Voile (velo) es muy parecido aunque más liviano y este se suele fabricar con algodón y lino o poliéster.
- Viscosa. Es una fibra manufacturada de origen natural (celulosa). Se la conocía como “seda artificial” hasta que en al primera mitad del siglo veinte empezó a denominarse Rayón. Esta versátil fibra es tan cómoda como otras fibras naturales, algodón, lana, seda o lino, y puede imitar el tacto de estas.
- Chambray. Es otro tejido suave hecho de algodón, aunque actualmente se utilizan también otras fibras. Su aspecto es similar al Denim (tela vaquera) pero mucho más ligero. Por esta razón es muy utilizado en prendas de primavera y verano. Por su color e textura puede ser un sustituto ideal de la ropa vaquera.
- Tela vaquera (Denim o Mezclilla). Es una tela pesada, originalmente de algodón, con poco drapeado. Aunque no está claro su origen, parece ser que surgió en Europa en la Alta Edad Media y más concretamente en Nimes (Francia). De ahí el nombre de la tela, DE NIMes. Su éxito se debió a su resistencia y fue Levi Strauss quien, por esta característica, empezó a fabricar tiendas de campaña y pantalones para los mineros americanos, durante la fiebre del oro, en 1853.
- Seda. De origen natural es producida por varios grupos de insectos aunque actualmente se usa la de los capullos del “Gusano de Seda”. Es un tejido, en algunas ocasiones, resbaladizo y difícil de trabajar. Ligera, con una caída excepcional y un tacto agradable es muy popular en el mundo de la moda.
- Satén. La consistencia y brillo caracterizan este tejido a base de algodón. Parece que, al igual que la seda, su origen proviene de china. Sus irisaciones, suavidad y tacto lo han convertido en uno de los preferidos de la moda en ropa de cama e interior. Lencería, batas, camisones, etcétera han sido tradicionalmente las prendas con las que se utilizaba el Saten. No obstante, en la actualidad, hay diseñadores que, por su brillo y caída, han basado sus diseños de trajes de noche en este tejido con un resultado extraordinario e impactante.
- Lana. Fibra natural obtenida fundamentalmente de cabras y ovejas aunque existen otros mamíferos que también la proporcionan. Existen varios cientos de tipos de lana lo que es igual a un mismo número de tejidos cada uno con sus peculiaridades y diferencias. Lo que es común a todas es su resistencia y versatilidad. Su capacidad para retener el calor es la que la hizo y ha mantenido popular en la creación de prendas para climas fríos.
- Franela. Es un tejido suave y ligero. Originariamente se fabricaba a partir de la lana. Actualmente se fabrican también desde el algodón o utilizando, incluso, fibras sintéticas. El uso de esta tela, por su capacidad para retener el calor, se popularizó entre las personas que trabajaban a la intemperie en zonas frías.
De ninguna manera he pretendido mostrar aquí una lista exhaustiva. Recorrer someramente algunos de los tejidos utilizados en la confección de prendas actualmente e intentar razonar porqué se usan unas u otras en función de la prenda en cuestión es el objeto de este post.
A.D.SAIZ
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