El uso de anillos en el dedo pulgar ha sido un ir y venir en cuanto a moda se refiere, como muchos otros usos y costumbres a lo largo de la historia. Existen referencias constatables del uso de anillos en este dedo desde las primeras dinastías del Antiguo Egipto. Su uso, no obstante, ha ido modificándose a lo largo de los distintos periodos dependiendo de las diferentes culturas e interpretaciones. Han sido y son usados indistintamente por hombres y mujeres de prácticamente todas las edades.
En el British Museum podemos contemplar una momia de una mujer egipcia con anillos en ambos pulgares. Durante la Edad Media y el Renacimiento europeo, los anillos que se usaban en los pulgares eran de un tamaño descomunal y habitualmente estaban adornados con gemas o huesos y dientes de animales. También dependiendo de la época unas veces eran las clases sociales más altas las que lo usaban y en otros periodos las clases más bajas. Actualmente no hay distinción de clases, edades o géneros en su uso, si bien son mayoría las mujeres jóvenes las que gustan de lucir los anillos personalizados en sus pulgares.
En la antigüedad los anillos en el pulgar eran considerados un amuleto o talismán para alejar el mal de ojo o protegerse de las enfermedades. De hecho actualmente en algunas sociedades se considera que lucir un anillo de oro en el dedo pulgar aleja la mala suerte. Máxime si contienen algún símbolo que aumente este poder, un ojo griego, ojo del demonio, ojo de Horus… y un largo catálogo de alegorías contra el “mal de ojo”.
Ya en la Baja Edad Media y hasta el Renacimiento, un pulgar femenino con anillo mostraba el compromiso de amor con su pretendiente. Era habitual ofrecer esta joya, para este dedo, para sellar un compromiso matrimonial.
Actualmente, el significado puede variar mucho dependiendo de la persona que lo luzca, la cultura en la que se desenvuelva y la “tribu” a la que pertenezca. Para algunos tiene connotaciones sexuales o psicológicas aunque para la gran mayoría solo conlleva un componente de moda y actualidad.
Muchos especialistas en comportamientos sociológicos mantienen que el pulgar representa la independencia, está separado de los otros dedos, es el ego, el “yo”, el punto de pinza fundamental en la colaboración con los otros. Cada uno de nosotros con respecto a la sociedad.
En algunas ambientes culturales, las mujeres homosexuales llevan un anillo de plata en el dedo pulgar para lucir públicamente el orgullo de su tendencia lésbica.
Si deseas usar un anillo personalizado con alguna inscripción extensa, un anillo para el dedo pulgar es el adecuado. Normalmente estos son más anchos por lo que permiten textos más grandes o de más longitud o grabaciones e inserciones alegóricas más complejas.
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