Tener la capacidad de diseñar tus propias joyas puede ser muy útil a la par que gratificante. Quizás seas un aspirante a diseñador/a o estas empezando a plasmar tus ideas en un papel. Esa pieza que has imaginado tantas veces y estas intentando plasmar en un papel para pedirle a un joyero que te la fabrique. Puede ocurrir que seas un apasionada/o de la moda y quieras diseñar esa joya que se adapte a un modelo concreto. Vamos a intentar, sea cual sea la razón de tu interés por el diseño de joyas, ofrecerte algunas recomendaciones para llevarlo a cabo.
Un primer elemento a tener en cuenta cuando comenzamos a dibujar nuestra joya, anillo, collar, pulsera o pendiente es la perspectiva. O lo que es lo mismo, como vemos la joya dependiendo del lugar desde el que la observamos. Es interesante que elijamos un punto principal en la pieza y desarrollemos su diseño de forma que, con independencia desde donde miremos, el punto elegido sea el principal.
Otra consideración a tener en cuenta, sobre todo si estamos decididos a que nos la fabriquen, es la proporción y escala de nuestro diseño. Prácticamente todos los modelos de joyas podemos plasmarlos en una hoja de papel pero hemos de pensar cómo quedará el dibujo una vez convertido en nuestra joya real. Podemos realizarlo en una escala 1:1, tal como será pero también puede ocurrir que los detalles de relieve o grabado de nuestras piezas tengan cierta complejidad. En este caso utilizaremos una proporción diferente lo que nos ayudará a visualizar y dibujar el detalle de forma más cómoda. Lo mismo ocurre con las proporciones; al tratarse de piezas minúsculas mantener las proporciones adecuadas es muy importante. Si no lo hacemos nos encontraremos con que al fabricarla obtendremos piezas con grandes diferencias que en ocasiones pueden resultar poco deseadas.
Si hacemos un recorrido por los diseños de los joyeros más importantes podremos encontrar, en algunas ocasiones, piezas que se han realizado para lucimiento del profesional pero que son poco fáciles de llevar. Has de conjugar tu imaginación y capacidad de diseño, con toda la libertad artística de la que seas capaz, con el hecho de que el resultado final, la joya que has creado, puedas portarla con comodidad. Ten en cuenta que la sencillez suele ser elegante. Lo contrario será una obra artística que reposará en un joyero o el fondo de un cajón. Aquellos pesados collares setenteros son un ejemplo de lo que puede ser una pieza poco portable. Por lo tanto, la portabilidad y la comodidad son los aspectos que hay que considerar. Decidir cuál es la intención de tu diseño, te guiará en el proceso de forma orgánica y natural. Saber para quien o quienes son tus diseños también te orientará. No es lo mismo un diseño infantil, para mujer o para hombre.
Lo más importante es que disfrutes y te diviertas tanto durante el proceso de diseño como sea posible. Si además el producto final también te resulta satisfactorio y divertido habrás descubierto que eres un/a especialista en el diseño de joyas.
Annabelly
Comments (0)